La modernidad viste de capa española: la utilización de mano de obra infantil arrendada y presidiaria durante la conformación de los mercados laborales en Osorno en la segunda mitad del siglo XIX
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Resumo
fines del siglo XIX el ritmo de los tiempos hubo de cautivar las mentes y las acciones de gran parte de las élites económicas y políticas de Chile, incluidas las regionales. Resaltando la conformada en la frontera sur de La Araucanía por los colonos germanos y sus descendientes. Lugar de peregrinaje de los impulsores de la mecanización del trabajo, extensos trabajos de la época intentaron traducir en palabras la admiración y el asombro que les causaba su pujante
desarrollo fabril, tan alejado del centro del país y del mundo. Sin embargo, bajo la estructura estadística de análisis, el modelo fabril germano distó notablemente de ser un proceso de modernización de la sociedad, tal cual se propuso. Ante la imposibilidad de la revisión completa del proceso, proponemos ciertas líneas de análisis no utilizadas, la principal: el estudio del trabajo y su mercado laboral. Destacamos -e intentamos explicar- dos formas laborales de cuño tradicional que fueron utilizadas, aceptadas y avaladas por las élites industriales y políticas. Élites que integraron la tradición laboral como forma de maximizar la productividad -y control- de los sectores trabajadores de la ciudad de Osorno a fines del diecinueve.